Pienso que los eclipses actúan como disruptores cósmicos, marcando el comienzo de períodos de cambio y transformación.
Los eclipses solares suelen traer revelaciones y comienzo de ciclos (mientras que los eclipses lunares significan cierres y finales).
Un eclipse solar es una conjunción del Sol y de la Luna, o sea una Luna Nueva, pero además tiene que darse cerca de alguno de los Nodos: Norte o Sur.
Los eclipses ****de Sol son oportunidades, algo que estaba oculto o nos confunde se revela en esa ventana de tiempo que va desde un par de semanas desde que el eclipse empieza a tomar forma hasta aproximadamente dos semanas después (y podemos sentirlo también desde unos días antes).
Nos envían señales, iluminan u oscurecen el camino de nuestra vida.
Mañana sábado 14/10 a las 15 hs. (hora de Argentina, GMT-3) tenemos un eclipse anular de Sol en el grado 21° 10’ de Libra.
Mucho va a depender de en qué Casa de tu Carta Natal caiga y qué aspectos haga (o no) con tus planetas natales y otros ángulos o puntos importantes.
Considero la temporada de eclipses activa mientras que el Sol y la Luna están a no más de 19° del eje nodal, que es la amplitud necesaria para que se produzca el eclipse (a mas de 19° grados del eje nodal no es posible que haya eclipse). Esto es, aproximadamente, un par de semanas.
Gracias a astrólogos como Carl Jansky y sobre todo Bernadette Brady, podemos agrupar los eclipses en familias según la serie Saros a la que pertenecen e interpretarlos de acuerdo a esto.
La serie Saros (o ciclos de Saros), fue desarrollada por los Caldeos.
Ellos descubrieron que una serie de Saros completa abarca 70 o 71 eclipses solares y dura aproximadamente 1.260 años. Gracias a esto se hizo posible predecir con exactitud cuándo va a haber eclipses.
También descubrieron que un eclipse se repite en el mismo lugar del cielo cada 223 lunaciones. Los 70 o 71 eclipses de la serie de Saros siguen un esquema predecible:
El primer eclipse de la serie comienza con un eclipse solar muy débil, que puede darse en el Polo Norte o en el Polo Sur. Los siguientes eclipses de la misma serie se van alejando progresivamente del polo.
Hacia la mitad de la serie los eclipses comienzan a ser totales a medida que se van alejando del polo, donde comenzaron, y se acercan a la zona ecuatorial.
Más tarde, después de una serie de eclipses totales y anulares, comienzan de a poco a transformarse de nuevo en, cada vez más, parciales para, finalmente, acabar en el polo opuesto al que comenzó la serie.
Existen 38 series de Saros de eclipses solares y 38 series de Saros de eclipses lunares, estando todos ellos, actualmente, en diversos estadíos.
Cada eclipse de una serie de Saros toma la naturaleza del signo en que se produjo el primer eclipse de la serie. Concretamente levantamos la Carta Natal de ese eclipse y lo interpretamos de acuerdo a lo que allí veamos.
El eclipse de mañana corresponde al número 134 de la serie Saros. Bernadette Brady lo nombra como el eclipse número 7 del nodo sur, el primero de esta serie fue el 22 de junio de 1248 y levantando la carta vemos que tiene una naturaleza canceriana, y está marcado por la cuadratura Marte-Plutón que le hace aspecto al eclipse.
Ella dice:
“El inmenso poder, la ira y la fuerza de Marte en cuadratura con Plutón se canalizan hacia esta familia de eclipses a través del trígono. El individuo que experimenta esta serie descubrirá que grandes obstáculos se eliminarán repentina y fácilmente o, en el lado negativo, una crisis potencial pendiente se manifestará repentinamente y avanzará por su vida muy rápidamente.
De cualquier manera, el individuo sentirá que todo avanza a gran velocidad.”
No hay dudas de que este es un eclipse fuerte, y pienso que sucede en un momento de grandes crisis y RIVALIDADES (personales y globales) en donde se hace urgente el dejar ir todo aquello que no necesitamos y por retenerlo se estanca, se pudre y nos contamina.
Hay que abrazar lo esencial y deshacerse de todo lo que nos sobra para que la vida fluya liviana.