¿Alguna vez te has preguntado por qué nos atraen más algunas personas que otras? ¿O cuál es la atracción? ¿Por qué somos más compatibles con algunas personas, ya sean socios, amigos, colegas o pares, y no tan compatibles con otras?
Una Sinastría en Astrología es una carta compuesta que analiza relaciones entre dos o más personas. Implica la comparación de dos o mas cartas natales para determinar áreas de fortaleza y debilidad en las relaciones.
Qué es una sinastría? Todos y cada uno de nosotros tenemos los 10 planetas y luminarias en nuestras cartas, pero sus posiciones por signo, casa y aspecto son individuales para cada uno. Cuando interactuamos con otros, las energías individuales de nuestras Cartas Natales forman relaciones especiales con sus energías individuales. La interacción resultante es tan compleja y única como nuestras propias personalidades.
Comúnmente también llamada Sinastría de parejas, esto no es del todo acertado pues, si bien está muy difundida en cuanto a relaciones amorosas, no únicamente se utiliza esta técnica para observar relaciones de a dos.
Existen diferentes métodos para realizar un análisis sinástrico: las cartas de relaciones de Davison, el horóscopo compuesto, la carta del primer encuentro, pero la mas difundida es la superposición de las Cartas Natales de las personas a relacionar.
Algunos preguntarán, por ejemplo, “¿Se lleva bien un Leo con un Escorpio?” Si bien estas comparaciones tienen algún valor, son muy generales. Muchos otros factores están involucrados al evaluar la compatibilidad de dos personas.
Como decíamos, usualmente la Sinastría se utiliza para observar la compatibilidad de una relación de pareja, pero bien puede ser utilizada para contrastar y comparar las Cartas Natales de diferentes personas en grupos de trabajo, relaciones grupales en general, relaciones poli amorosas, vínculos familiares, relaciones amistosas, etc.
Quizás un buen modo de llamarla sea astrología relacional. La Sinastría en Astrología es el arte de interpretar las relaciones.
El término Sinastría viene del griego σyν (syn):, que significa ‘conectar más’ y de άστρον (ástron): que significa ‘estrella’. Puede interpretarse como “relacionar más estrellas”, esto es sumar los elementos de diferentes cartas como mencionamos anteriormente.
El gráfico de una Sinastría es un gráfico de dos o mas ruedas que muestra dos (o mas) gráficos individuales de forma superpuesta. Los planetas (y ángulos) de una persona se dibujan en la rueda externa y se conectan a los planetas de la segunda persona (o mas) en la rueda interna dibujando líneas de aspectos.
En una Carta Sinástrica se analizan las relaciones que se dan entre los diferentes planetas de ambas cartas entre sí, contemplando además los signos, los ángulos y las casas en que estos se encuentran, los aspectos que se forman entre los planetas y otros objetos de la carta involucrados, dando principal importancia al Sol (la auto expresión), la Luna (nuestras emociones, cómo sentimos), Venus (cómo nos relacionamos) y Marte (cómo deseamos, la sexualidad), las casas angulares: los ascendentes (el comportamiento externo, aquello que debemos aprender uno del otro) y el Descendente o casa VII (la casa de las relaciones) así como el Mediocielo o Casa X y el Fondo del Cielo o Casa IV. Los planetas regentes de cada Ascendente también llevan especial importancia en esta lectura.
En el análisis sinástrico, la interacción de las demás casas entre dos gráficos determina el papel que los individuos se han asignado entre sí con respecto a los planetas involucrados.
El balance de los elementos (Fuego, Agua, Aire y Tierra) de ambas cartas también son evaluados especialmente en una Sinastría.
¿Cómo funciona la sinastría?
La posición de los planetas en la carta de la persona número uno se superponen sobre la Carta Natal de la persona número dos, lo que resulta en una serie de aspectos nuevos entre los planetas de la persona uno y los planetas de la persona dos. Luego se invierte el procedimiento. ¿Suena complicado? Al principio lo es. Sin embargo, la práctica hace la perfección.
Ejemplo: Mi Venus está a 21 grados del signo de Escorpio. Si me compararan sinástricamente con alguien cuya Luna está a 21 grados de Tauro, se revelaría que tenemos una oposición sinástrica de Venus-Luna. ¿Por qué? Porque si pusieras mi Venus en el otro horóscopo, sería exactamente opuesto a esa Luna. (Dado que Escorpio y Tauro son signos del zodiaco opuestos).
Del mismo modo, si pusieras la Luna de Tauro en mi horóscopo, de hecho se opondría a mi Venus a 21 grados de Escorpio. La conclusión de las comparaciones sinástricas es que cada parte reacciona de acuerdo con el planeta involucrado en el aspecto. En el ejemplo anterior, mi respuesta a la otra persona sería en términos de la naturaleza de la experiencia amorosa de Venus (o en términos de algunas de sus cualidades relacionadas), y la persona número dos respondería en términos de la esencia instintiva de la Luna, sentimiento receptivo.
“Los opuestos en realidad se atraen; también lo similar, pero los similares se aburren el uno del otro y es necesaria la correcta combinación para que se complementen y al mismo tiempo se identifiquen el uno con el otro”.
Robert Frawley
Como individuos, tenemos muchas facetas y expresamos nuestros arquetipos internos de manera diferente según la posición de los planetas. Además, cada relación es única y está en línea con la combinación única de la superposición de los dos (o más) gráficos.
Sin entrar en demasiados detalles, la astrología ha descubierto que hay coincidencias de compatibilidad aceptadas entre diferentes signos del zodiaco en un nivel básico. Sin embargo, es importante tener en cuenta que, aunque algunas personas pueden compartir el mismo signo solar, cada persona sigue siendo diferente.
El uso de la Sinastría como análisis de relaciones es relativamente nuevo. Si bien no se la llamaba Sinastría en la antigüedad, se basa en las creencias de los psicólogos griegos, romanos y egipcios, que se han transmitido de generación en generación. En la astrología clásica tampoco se la utilizaba del modo en que lo utilizamos ahora. Actualmente esta técnica ha logrado mucha difusión con excelentes, muy precisos y muy valiosos resultados.
La Sinastría permite conocer cuáles pueden ser los temas en común de una pareja o vínculo cualquiera entre dos o más personas, cuáles los conflictos emocionales, cuáles sus similitudes, cuáles áreas podrían trabajarse para desarrollar una relación más armónica, cuáles sus energías disponibles en común para emprender proyectos conjuntos.
Para conformar una Sinastría es necesario, al igual que en la Carta Natal, conocer la fecha, hora (lo más exacta posible) y lugar de nacimiento de cada uno de los componentes a analizar.
Al igual que con la Carta Natal o cualquier informe que nos devuelva una interpretación astrológica, sugerimos tener cautela con comprar una Sinastría online ya que en general la devolución suele ser realizada automáticamente por un software, lo cual inevitablemente las hace genérica: no es personalizada, devuelve exactamente los mismos resultados para cualquier persona que tenga la misma configuración natal, y en Astrología siempre decimos que no existen dos personas iguales, por lo tanto la interpretación debe ser única y personalizada.
Preguntas que podemos responder a través de la Astrología con una Sinastría:
– ¿Nuestras personalidades y egos cooperan o chocan?
– ¿Cómo expresamos nuestras energías activas y de apoyo?
– ¿Cómo es nuestra comunicación y afinidad mental?
– ¿Tenemos una conexión amorosa?
– ¿Cómo es la atracción física y sexual entre nosotros?
– ¿La diversión y el optimismo son parte de nuestra reunión?
– ¿Somos responsables y comprometidos el uno con el otro?
– ¿Cómo se relaciona la libertad y la imprevisibilidad con nuestra reunión?
– ¿Tenemos una conexión espiritual?
– ¿Tenemos una conexión magnética?
– ¿Cómo se relaciona nuestra reunión con la carrera?
– ¿La sensibilidad y el cuidado están presentes en nosotros?
– ¿Cómo conectamos nuestras mentes y emociones?
– ¿La ternura y la sensualidad están presentes entre nosotros?
– ¿Cómo se fusionan nuestras emociones y atracción física?
– ¿Cómo lidiamos con la madurez y las responsabilidades?
– ¿Es la empatía y la espiritualidad parte de nosotros?
– ¿Cómo nos relacionamos con sentimientos extremos?
– ¿Cómo funcionan juntos nuestro intelecto y afecto?
– ¿Competimos en nuestras ideas y opiniones?
– ¿Es el amor y la pasión parte de nosotros?
– ¿Emparejamos para una relación a largo plazo?
– ¿Nuestra reunión es intensa y abrumadora?
La Sinastría da respuestas concretas a todas estas preguntas, y lo más interesante es que mediante el análisis de estas respuestas podemos influir sobre algunos de estos comportamientos, modificando desde el ejercicio de observar nuestra conciencia nuestras relaciones hacia un despliegue más amoroso y armónico.
“¿Por qué alguien encuentra la pareja ideal en un viaje al extranjero o en el sitio más imprevisto?
¿Por qué una pareja que se lleva bien tiene períodos de inestabilidad?
¿Por qué entre tres amigos dos de ellos se entienden mejor que con el otro?”
Pregunta Richard Idemon en su maravilloso libro “Astrología de las relaciones”
Richard Idemon también dice en el mismo libro:
“La enseñanza de la astrología en este sentido es que demuestra que cuando dos planetas están mal aspectados en los horóscopos de dos personas, pueden causar discordia en las relaciones o incluso separación. Naturalmente, todo despende de la voluntad que haya en la pareja porque, como sabemos, somos libres y el 99 % de lo que se refleja en la carta son “tendencias” que se pueden cumplir.”
Y esto es algo muy interesante de destacar ya que el libre albedrío no es algo opuesto al resultado de una Carta Natal (o una Sinastría en este caso): hay un destino, pero nosotros somos los capitanes que ayudamos al barco a llegar a buen puerto.
Todas las relaciones tienen la posibilidad de ser mejoradas, desarrolladas con mayor entendimiento y sabiduría. Hay que aprender a poner el foco en aquello que estorba, realizar ejercicios de mirada introspectiva, conocerse mejor a uno mismo para poder conocer mejor y enseñar a los demás desde un lugar amoroso, un lugar de comprensión y empatía.
El astrólogo debe estudiar e interpretar el horóscopo con los mejores sentimientos y sin involucrarse emocionalmente, para ver de qué manera puede ayudar a los nativos de una manera impersonal y fraternal.